Olvídate de la cara de póker y muestra tus emociones al hablar en público
Los beneficios de una cara de póker son ampliamente elogiados en ese famoso juego, pero también en la vida.
La “poker face” ayuda en las cartas, por supuesto, pero también en las negociaciones y los tratos en la mesa de la sala de conferencias cuando hay mucho en juego.
Y se supone que las caras de póker son útiles para pedirle algo al jefe, como un aumento, por ejemplo.
Sin embargo, un estudio reciente (traducido automáticamente al español – ver original en inglés) analizó en profundidad las caras de póker y las comparó con otras más expresivas, y descubrió que confiamos más en las caras expresivas que en las menos expresivas.
Lo que nos indica que no debes dejar que tu cara se quede en blanco al hablar, incluso si la adrenalina te empuja en esa dirección, porque estás tratando de conectar con el público, y el público es humano.
Una cara más expresiva tiene más facilidad para construir una relación. Las relaciones dependen de la confianza, y la confianza depende de comprender lo que el otro ser humano está sintiendo o intentando.
Entonces, para construir una relación con tu audiencia, deja a un lado la cara de póker cuando hables y, en cambio, muestra lo que estás sintiendo.

Lo que más nos importa cuando conocemos a alguien por primera vez, o en cualquier momento, es si podemos confiar o no en esa persona.
¿Tiene buenas intenciones o está ocultando algo? Una cara de póker deja a la contraparte con la duda, incapaz de leer la intención de su interlocutor y, por lo tanto, lenta para generar confianza.
No podemos conectar con el otro si no tenemos una idea de lo que está pensando y sintiendo.
Además, el estudio descubrió que las personas más expresivas eran más agradables y tenían un rasgo personal más alto de amabilidad. Entonces, speakers, si quieren sorprender a una audiencia, ¡”díganlo con la cara”!
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Pero vayamos un poco más a fondo. ¿Qué más, además de la expresividad, es útil para conectar con la audiencia?
Hay un conjunto de investigaciones más antiguas que se centran en determinar qué es importante para las audiencias en los speakers. En resumen, ¿qué hace que un speaker sea exitoso?
La respuesta es consistente con esta investigación reciente: dos cosas, confianza y credibilidad.
Nosotros, el público, queremos saber que podemos confiar en quienes nos hablan, al igual que la gente en general, y queremos encontrarlos creíbles. Denos esos dos atributos y estaremos felices.
Ambos tienen componentes tanto verbales como no verbales. Demuestras confianza en términos de contenido al mostrar que entiendes los problemas de la audiencia. Estableces credibilidad al mostrar que sabes cómo resolver esos problemas.
En términos de lenguaje corporal, estableces confianza con un comportamiento y gestos abiertos, y credibilidad con un comportamiento y gestos autoritarios.
La voz es especialmente importante en este sentido: para establecer autoridad, habla en el extremo inferior de tu rango vocal, pero no en el más bajo.
Los spreakers a menudo sobrecompensan instintivamente, llevando sus voces demasiado bajas, logrando así una calidad vocal similar al sonido de las ardillas jugando con las piedras, no muy autoritaria. Y una voz demasiado aguda puede sonar estresada o frenética, así que tampoco te vayas por ahí.
Entona tu voz en tu rango de conversación natural y ten una conversación real y cómoda con tu audiencia.
No estás jugando al póker; estás conectando.